Mamen Muñoz. “Para mí, golfo es toda aquella persona que vive a su manera, sin molestar a nadie, y utilizando el humor como sistema crítico. Hubo golfos de la cultura, la pintura, el cante flamenco, la hostelería, el espectáculo, el periodismo, la universidad, el cine, el teatro…”, aclara Joaquín Arbide, el escritor y periodista que ha presentado este martes en La Carbonería su último libro: La Sevilla golfa. Historias de una ciudad que se liberó a sí misma, (de la editorial sevillana El Paseo), ya disponible en todas las librerías de la ciudad desde el pasado 26 de noviembre, y también en otras librerías españolas y en algunos puntos de América del sur, «Sevilla llama la atención en todas partes, me comunica la editorial», señala Joaquín Arbides.
En La Sevilla golfa, a modo de memorias muy personales y pinceladas nada convencionales, Joaquín Arbide somete su memoria al relato narrativo y vivencial de alguien que disfrutó, palpó y padeció el ambiente heterodoxo y liberador de los años setenta en Sevilla, en primera persona, y especialmente desde el mundo del periodismo, la radio, el teatro, los bares y salas de fiestas.
Entre las distintas farándulas que acoge este libro aparecen personajes de todo tipo que personifican este momento, muchos de ellos conocidos, como El Pali, Silvio, La Esmeralda, Peregil, Manolita Chen, José Antonio Garmendia, Beni de Cádiz, Don Curro, Gonzalo García Pelayo, Pancho Bautista, Paco Lira, Agustín García Calvo…; otros del mundo profesional de la hostelería, de la política, del periodismo; y también aquellos inmersos directamente en la picaresca, la indigencia o la mancebía… “Casi todos los personajes que aparecen en mi libro eran amigos, muy amigos y unos tipos maravillosos, quizás de los que queden pocos”.
– Este libro es un retablo de la Sevilla golfa realizado por “uno de sus supervivientes”. ¿Cómo es sobrevivir a la Sevilla gofa?
– Muy fácil. Siendo golfo.
– La Sevilla golfa es un recorrido sobre la liberación de mentalidades en esta ciudad, que llega precisamente en un momento político marcado por cierta controversia con estas últimas elecciones, ¿no le parece?
– El libro se sitúa a caballo entre finales de los años 60 y principios de los 70. Es decir, en un momento difícil de la Historia de España, y que no tenía nada que ver con lo que se está viviendo ahora. Entonces teníamos que utilizar las medias palabras, los sobreentendidos, el humor soterrado para poder manifestarnos.
– ¿Cuáles son sus lugares y personajes preferidos de esa época?
– Todos los que cito en el libro: Bares, tabernas, teatros, la calle, la madrugada, una emisora de radio… La Cuadra, de Paco Lira, madrugadas de arte, política oculta, cenáculo de los elegidos. Aquel lugar, prolegómeno de la actual Carbonería que llevan los dos chiquillos de Paco: Sergio y Pisco.
– El libro incluye un amplio juego de imágenes: fotos de personajes, plazas, escenarios y espacios de más o menos reputación, donde era posible aquello que estaba prohibido, y donde se consolidaban por igual estrategias de represión y liberación que dieron a Sevilla un sesgo muy especial como ciudad abotargada y, al mismo tiempo, liberada y creativa. ¿Quiénes son los autores de estas imágenes? ¿tira también de archivo personal?
– Varios artistas sevillanos, alguna mía, y también de mi gran amigo José Manuel Holgado Brenes, como la de la portada.
– ¿La Sevilla golfa se dirige más a los mayores, que vivieron en este tiempo en Sevilla, o a los jóvenes que se la perdieron?
– Este libro, como dice en la portada, habla de una ciudad que se liberó a si misma. Una ciudad que vivía un tanto anclada en el pasado, algo encorsetada y que gracias al humor y al ingenio personal del sevillano, supo abrirse al futuro. Por tanto el libro es para todos, viejos y jóvenes.
– Desde el año 2000 se dedica a la literatura, y en estos años ha publicado veinticuatro títulos, ¿todos sobre Sevilla?
– La mayoría, sí.
– Veinticuatro libros en menos de veinte años, es más de un título publicado al año, se ve que no le falta inspiración en esta ciudad…
– Sevilla es inagotable. Algunos libros fueron de encargo. Pero cuando dejé el periodismo activo, la radio y la televisión, me encerré en mi estudio y empecé a volcar sobre el papel todo lo que llevaba dentro desde que empecé en esto allá a comienzos de los años 60.
– Aunque nació en la provincia de Badajoz a principios de los años cuarenta y su infancia y primera juventud transcurrieron en Tetuán (Marruecos), ¿se siente sevillano de adopción?
– Vivo en Sevilla desde 1957. Llegué aquí con 16 años. ¿De dónde quieres que sea?
– Ha trabajado a lo largo de su vida en radio, prensa, televisión y publicaciones digitales. Por tanto, nos gustaría pedirle que nos enviara un mensaje de bienvenida a Sevilla Buenas Noticias, como medio de comunicación que acaba de arrancar hace apenas un mes en la ciudad, para contar su lado positivo.
– Os deseo mucha suerte, compañeros. Y como periodista viejo, termino con una pregunta: ¿Por qué lo de «Buenas noticias», Porque solo vais a dar las noticias que convencionalmente se consideran buenas o es que para vosotros todas las noticias son buenas en tanto son noticias? Larga vida a vuestra publicación, sinceramente.
Joaquín Arbide, además de afamado periodista y escritor, realizó cine independiente, y dirigió el Teatro Universitario de Sevilla y la compañía Tabanque, con la que consigue un Premio Nacional de Teatro. Y, precisamente, este martes 11 de diciembre (a las 20:00 horas) se celebra un acto commemorativo de los 50 años de la creación de Tabanque, en la sede del Centro de Documentación de las Artes Escénicas de Andalucía (C/ Santa Lucía, 10), en el que se compartirá con los asistentes la visión de la realidad teatral de los convulsos años 60. Tabanque fue uno de los grupos de teatro independiente más prolífico: a lo largo de su existencia produjo más de cien montajes teatrales. Pero, sobre todo, fue pionero del movimiento que vendría después en España con grupos como Los Goliardos, Tábano, Esperpento y tantos otros que llevaron la escena por todos los rincones de nuestro país.