C.P.G. Sevilla se prepara para vivir una de sus jornadas grandes de la Semana Santa, con las principales devociones de la ciudad -algunas de ellas universales-, con las cofradías más numerosas, y lo hace con “moderado optimismo” después de conocer los últimos pronósticos del tiempo de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que anunciaba solo “aviso amarillo por lluvias en la provincia, sobre todo en la Campiña y en la Sierra Norte, hasta las 18 horas”.
La Primitiva hermandad de nazarenos del Silencio, considerada ‘Madre y Maestra’, pondrá su cruz de guía en la calle a la 1 de la madrugada y solo 15 minutos después pedirá la venia en la Campana. En el primer paso, barroco, dorado e iluminado por cuatro faroles de plata, procesiona la imagen de Jesús con la cruz a cuesta, realizada en carey y plata en el siglo XVII. El paso de palio de palio está inspirado en la basílica de San Marcos de Venecia y estará exornado, como es tradicional, con azahar. A la salida, por la puerta que da acceso a la calle El Silencio, se cantan saetas a los titulares de la cofradía, incluida la Santa Cruz. Dos nazarenos, de los 1.200 de túnica de cola y ruan negro que integran el cortejo, portan un cirio votivo y una espada junto a la bandera concepcionista en recuerdo del dogma concepcionista y el voto de sangre de 1615. Su entrada está prevista a las 6.20 horas del Viernes Santo.
El Señor de Sevilla, Jesús del Gran Poder, saldrá de su basílica a partir de la 1 de la madrugada, e irá acompañado por 2.700 nazarenos de túnicas negras de cola, con ancho cinturón de esparto. Manuel Villanueva toca el martillo del magnífico paso barroco de Francisco Antonio Gijón que porta al portentoso Nazareno de Juan de Mesa (1620), que también hizo el San Juan que acompaña a la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso bajo un palio de Rodríguez Ojeda. Llaman la atención la cruz de guía, dorada con todos los atributos pasionistas y el guion dedicado a la Epifanía, realizado por Armenta. Tiene prevista su entrada a las 6.25 horas de la madrugada.
La Basílica de la Macarena abrirá sus puertas a las 12 de la noche aunque desde muchas horas antes habrá público aguardando allí la salida del Señor de la Sentencia y la Virgen de la Esperanza. En el misterio, Jesús maniatado, con su túnica de los ‘ochitos’, escucha su sentencia, leída por un sanedrita judío en presencia de Poncio Pilatos. Claudia Prócula, tres centinelas romanos, otro judío y un esclavo negro completan la escena. En el palio, la Virgen de la Esperanza, una bellísima talla anónima del XVII, que lucirá este año su manto de malla y la saya de los volantes, bordada por Victoria Caro entre 1936 y 1937. Los nazarenos, en un número cercano a los 3.000, visten túnicas y capas de color crema con antifaz y cíngulos morados en el primer paso y verdes en el segundo. La Centuria Romana desfila –los conocidos como armaos- tras el misterio, al que acompaña la banda de cornetas y tambores de la Centuria; en el palio va la Filarmónica del Carmen de Salteras. A las 13 horas del Viernes Santo está previsto que llegue el palio a su basílica.
La cuarta hermandad en la nómina llevará de nuevo el silencio a la Campana. Se trata de la cofradía del Calvario, que saldrá de la parroquia de la Magdalena a las 3.30 horas, desde la puerta del coro, con un cortejo integrado por 550 nazarenos de túnica de cola con cinturón de esparto. El crucificado de Ocampo (1612) va sobre un sobrio canasto de madera de caoba de estilo neobarroco, con un monte tallado, iluminado por cuatro hachones. La Virgen, de Astorga, procesiona bajo un palio realizado en terciopelo burdeos con bordados de Rodríguez Ojeda. Ambos pasos no llevan música y van exornados con lirios morados en el friso y claveles rojos en las jarras, y con claveles blancos, respectivamente. En su itinerario de ida, repetirá el recorrido de 2018: Gravina, plaza del Museo y Alfonso XII. Pedirá la venia una hora y cuarto después de la salida. Su entrada está fijada a las 7.40 horas.
A las 5.15 horas llegará de nuevo la algarabía a la Campana. A esa hora pedirá la venia la hermandad de la Esperanza de Triana, con 2.700 nazarenos. En el primer paso, el cirineo ayuda a sostener la cruz a Jesús, en el momento de su tercera caída. Un romano a caballo precede la imagen del Señor. En el segundo, la Virgen de la Esperanza, que lucirá este año el manto de Juan Borrero, bordado por sucesores de Elena Caro en 1944. El acompañamiento musical correrá a cargo de la banda de las Tres Caídas y la banda de la Victoria de las Cigarreras. Pondrá la cruz de guía en la calle Pureza a la 1.50 horas y regresará a su capilla al mediodía, tras recorrer San Jacinto, Pagés del Corro, Luca de Tena y Vázquez de Leca, junto a la parroquia de Santa Ana.
El Señor de la Salud de Los Gitanos acaparará muchas más miradas este año ya que porta su nueva túnica bordada en oro sobre terciopelo morado que, en 2017, un grupo de devotos regaló a la hermandad. Es la primera vez que el Señor luce esta túnica confeccionada por los sucesores de Elena Caro y que reproduce la pieza decimonónica atribuida a Rodríguez Ojeda que se perdió en el incendio de 1936 en la iglesia de San Román. Los 1.700 nazarenos visten túnica y capa blancas con antifaz de terciopelo morado. Tras el Nazareno irá la agrupación musical de la hermandad, que lleva su advocación en el nombre; la banda de las Nieves de Olivares irá con la Virgen de las Angustias, que este año llevará el manto de terciopelo burdeos con bordados en oro y el escudo de la Casa de Alba. Las puertas del templo de la calle Verónica se abrirán a las 2.30 horas y el regreso está previsto al mediodía.