Redacción. Un total de seis estudiantes con discapacidad de la Universidad Pablo de Olavide, cuatro de grado y dos de máster, han sido seleccionados para formar parte del programa de prácticas laborales de la Fundación ONCE y Crue Universidades Españolas, en su cuarta convocatoria.
Según informa la Universidad en una nota, denominado ‘Becas-Prácticas Fundación ONCE-Crue Universidades Españolas’, el programa pretende mejorar la carrera profesional de los universitarios y universitarias con discapacidad, a quienes facilita el acceso a una primera experiencia. Los beneficiarios de la última convocatoria comenzarán sus prácticas a partir del próximo mes de febrero. Recibirán una beca de 1800 euros por los tres meses de prácticas, un periodo ampliable a seis a instancias de la empresa. Las prácticas podrán desarrollarse en grandes empresas, pymes, microempresas, entidades de la economía social y del tercer sector, así como en otras instituciones y entidades públicas o privadas.
De los seis estudiantes de la Universidad Pablo de Olavide, tres están cursando actualmente el Grado en Trabajo Social, una de ellas cursa el Grado en Traducción e Interpretación en Inglés, otra alumna está estudiando el Máster Universitario en Cambio Climático, Carbono y Recursos Hídricos y otra estudiante el Máster Universitario en Diagnóstico del Estado de Conservación.
Curso académico. Desde que se puso en marcha en el curso académico 2016-2017, gracias a la cofinanciación del Fondo Social Europeo, un total de 21 estudiantes con discapacidad de la Universidad Pablo de Olavide han accedido a este programa de prácticas. Así, el estudiantado de la UPO ha podido desarrollar dichas prácticas en instituciones como Fundación CERMI Mujeres, Asociación Paz y Bien, Comité Paralímpico Español, Fundación Cocemfe, y empresas como la Fundación DKV Integralia, FCC Aqualia, Ferrovial Servicios, Ford, Nestlé España, Ediciones S.M., Sobexo Iberia, o Telefónica.
El objetivo de este programa es promover la realización de prácticas laborales por parte de estudiantes con discapacidad, incentivar a las empresas para que contraten a personas con discapacidad y fomentar nuevos vínculos entre empresa y universidad.
Pueden beneficiarse de él los alumnos y alumnas universitarios que tengan una discapacidad reconocida igual o superior al 33 %; estén matriculados en grado o máster (oficial o propio) en alguna universidad española o centro adscrito, y que hayan superado más del 50 % de los créditos de grado y/o máster del correspondiente título universitario. Se prioriza a los estudiantes de último curso y no podrán mantener relación contractual de tipo laboral, de prestación de servicios o asimilable en el momento de disfrutar de la beca. Desde su inicio en 2016, se han beneficiado de esta iniciativa un total de 1.237 alumnos con discapacidad de universidades y centros adscritos de toda España.
Según el informe elaborado por Sigma Dos por encargo de Fundación ONCE para medir el impacto de la iniciativa, la valoración de este programa es muy positiva para el alumnado. El trabajo evidencia también que el 40% de las personas becadas encuentran un empleo tras terminar su experiencia de prácticas, la mayoría relacionados con su área de conocimiento.
Por comunidades autónomas, Andalucía es el territorio en el que más becas se han concedido con un total de 323, seguido de Madrid con 157, Cataluña con 125 y la Comunidad Valenciana con 118. Le siguen Murcia con 92 becas, Galicia con 73, Islas Canarias con 70 y Castilla-La Mancha con 52. Figuran con menos de medio centenar cada una, Castilla y León (49), Extremadura (45), Principado de Asturias (42), País Vasco (23), La Rioja (19), Aragón (18), Navarra (14), Cantabria (9), Islas Baleares (6) y Melilla (2).