Redacción. Tomar el sol de forma saludable y precavida es beneficioso para la salud física y mental. Las bonanzas de una exposición solar controlada revierte en múltiples beneficios para el organismo y también para nuestro ánimo. La persona que consume rayos ultravioletas de forma adecuada y regular estará más sana y feliz gracias a su notable efecto en los niveles de Vitamina ‘D’ y Serotonina. El Hospital Universitario Virgen Macarena, ahora que comienza el verano, hace ver las virtudes y perjuicios en función de si se frecuenta una exposición solar mesurada o excesiva.
La luz solar es la principal fuente de Vitamina ‘D’ sobre todo en los países donde el sol luce con habitualidad. Esta vitamina es fundamental para diversos procesos biológicos. Tomar el sol con precaución ofrece beneficios musculares, cardiovasculares, respiratorios, neurológicos, inmunológicos y óseos.
Entre las funciones de la Vitamina ‘D’ destaca el hecho de permitir que nuestro organismo absorba el calcio. La luz solar se metaboliza de manera que genera Vitamina ‘D’, y ésta, a su vez, es la que facilita la absorción ósea del calcio. “El calcio fortalece la estructura ósea y previene la osteoporosis. La osteoroposis implica una disminución de la resistencia ósea”, aduce María José Miranda, doctora que pertenece a la Unidad de Osteoporosis y Metabolismo Óseo del centro sanitario sevillano, prestación que atiende al año más de 900 pacientes afectados por esta patología y dentro del cual se ha creado una consulta multidisciplinar para atender fracturas óseas graves cuyo origen se sospecha devengan de la osteoporosis.
Para prevenir una patología que aumenta el riesgo de fracturas óseas es necesario mantener unos niveles adecuados de Vitamina ‘D’. “Los niveles óptimos se consideran aquellos que superan los 30 nanogramos por mililitro de sangre, ya que son los que favorecen una absorción intestinal del calcio y su depositaje en huesos”, manifiesta la facultativa cuya unidad pertenece a Medicina Interna. En España se producen cerca de 330.000 fracturas por fragilidad ósea.
Código Europeo Contra el Cáncer
El Código Europeo Contra el Cáncer recomienda que para garantizar la correcta sintetización de la Vitamina ‘D’ es suficiente tomar el sol 10 ó 15 minutos al día exponiendo cara, brazos y piernas. “Es importante exponerse con la piel ‘limpia’, es decir, sin cremas ni protectores que ejerzan de pantalla. En verano esa exposición debe ser a primera hora de la mañana”, advierte la doctora Miranda. No obstante, “a una determinada edad el organismo tiene más dificultades para metabolizar la luz solar que absorbe la piel y en estos casos se suplementa con fármacos”, prosigue la facultativa.
De igual manera, el consumo excesivo de sol tiene efectos perniciosos para la salud. Algunos de ellos son cierta inhibición del sistema inmunitario, envejecimiento prematuro de la piel, trastornos de la vista como la catarata o la aparición de quemaduras cutáneas que pueden derivar en futuras lesiones como el cáncer de piel.
En cuanto a la prevención de los tumores cutáneos, el doctor David Moreno, jefe de servicio de Dermatología del Hospital Universitario Virgen Macarena insiste en una relación saludable con el sol. “Hay que evitar la quemadura solar desde los primeros años de vida. La reiteración de este tipo de situaciones puede generar melanomas en la edad adulta. Cuando vamos a tener una exposición prolongada debemos utilizar protección solar más allá de las cremas. Es decir gorras, gafas de sol, prendas protectoras. Debemos educar en ese tipo de prácticas desde la infancia”.