C.P.G. «¡Papá, me da miedo!», confesaba la pequeña María (3 años) a su padre, que la sostenía en los hombros, y su primo Darío mientras pasaban ante las gradas de la Catedral los osos polares de Arktika, el montaje de Sarruga Produccions, un gigantesco pasacalles incluido en la programación del Ayuntamiento de Sevilla para esta Navidad, Alumbra. Casi una hora llevaba junto a sus primos aguardando la llegada de los osos, para coger buen sitio ante el temor, confirmado, de que se congregara muchísimo público atraído por estos osos gigantes, madre e hijo, que al mismo tiempo despertaban miedo y ternura y cuyo objetivo es concienciar sobre la situación del Ártico ante el cambio climático.
«¡Chulísimo!», valoraban su hermano, Lucas, y sus primas Julia, Belén y Ángela, todos mayores que María, cuando ya habían pasado de largo hacia el Archivo de Indias y el público salvaba el tapón que se había producido en el primer tramo de la Avenida de la Constitución y empezaba a desplazarse sin aguardar al regreso de estos animales mecánicos movidos por domadores que, tras tanta expectación, supieron a poco.
Para los que se lo perdieron ayer, hoy hay una segunda (y última) oportunidad de ver a estos majestuosos osos recorrer el tramo de la Avenida que va desde la Plaza de San Francisco, donde tienen su particular refugio, cerca de las coronas de los Reyes Magos, hasta el Archivo de Indias y vuelta, un trayecto en el que invierten una hora, a las 20 horas.
Los osos polares recorrerán Sevilla desde Plaza Nueva al Archivo de Indias