Rosa Brito. Originario de Estepa, José Manuel León Muñoz (1968), lleva la aventura en su sangre y su tierra por bandera. Entusiasta y trabajador, este estepeño lleva casi 30 años conociendo nuevos lugares, nuevas culturas y consiguiendo todas sus metas. Al llegar a la cumbre recuerda siempre su origen con una bandera de Andalucía donde se puede ver la Torre de la Victoria y leer el nombre de su pueblo.
El último de los proyectos que ha llevado a cabo ha sido la escalada de tres picos en la misma línea del Ecuador: los volcanes Cotopaxi y Chimborazo, ambos en la cordillera de los Andes, y la punta Nelion – Batían del monte Kenia, en el mismísimo corazón de África.
Dos continentes y tres montañas rodeadas de un clima extremo entre sus valles más profundos y sus cumbres más altas. Un propósito y una partida clara, comenzar con la infinita escalada de la pared Nelion a 5199 m. Aproximarse a este lugar acompañados por tribus locales caminando entre paisajes de sabana, selvas y un macizo lleno de afiladas agujas de roca. Según el propio León, «hizo que me transportase a la vez, a la sencillez y a la grandeza del todo».
La expedición la realizó junto a Paola Licheri, una escaladora italo-estepeña. Partieron desde Estepa a la punta Nelion-Batian, en el monte Kenia de África, el 6 de enero. Llegaron a la punta Lenana, de 4.895m, bajaron y subieron al día siguiente, en escalada clásica, los 750 metros de pared vertical para llegar a la cumbre del monte Kenia. Fue una escalada técnica y comprometida por lo expuesta que está la pared sobre un glaciar, y por el peso de todo el material que se debe llevar encima.
Una vez alcanzado el primer objetivo de África, el 16 de enero, se pusieron en marcha hacia Sudamérica, concretamente a la ciudad de Quito. Desde allí ascendieron al volcán activo más importante de Ecuador, el Cotopaxi, de 5897m. Contaron con un clima extremo y encontraron vertiginosas grietas que les hizo dudar sobre la subida. Sin embargo, la iniciaron el día 22 de enero e hicieron cumbre a las 6:30.
Llegaba el tercer objetivo, el Chimborazo, que es la montaña que, geográficamente por el achatamiento de los polos Norte y Sur, más cerca está al sol. Comenzaron la escalada a las 11 de la noche por un largo flanco rocoso, la parte más difícil del volcán. Fue una interminable loma de hielo con unos 50º de inclinación, muy expuesta y rodeada de glaciares y seracs. Alcanzaron una suave planicie cimera que los dejó, media hora después, en lo más alto de la montaña, a 6.263m.
La expedición duró 45 días y discurrió con muchísimas horas de caminatas y porteos de materiales por tribus y gente local. Todo ello, permitió que estos dos escaladores estepeños lograran su objetivo de hacer cumbre en los picos Cotopaxi, Chimborazo y la punta Nelion – Batían del monte Kenia.
