Redacción. El Hospital Universitario Virgen Macarena ha puesto en funcionamiento recientemente la primera Unidad de Diabetes y Embarazo para la atención integral a la mujer gestante con diabetes de especial complejidad y que supone ampliar la cartera de servicios del centro mediante un equipo multidisciplinar con especialistas de los Servicios de Endocrinología y Obstetricia, en coordinación con los equipos de Atención Primaria del área hospitalaria.
La nueva Unidad de Diabetes y Embarazo del Hospital se encuentra enmarcada en el desarrollo del Plan Integral de Diabetes de Andalucía, que propone la creación de unidades multidisciplinares de atención a la mujer gestante con diabetes para la atención a la diabetes pregestacional y a la diabetes gestacional compleja, informa el hospital en una nota.
La diabetes mellitus(DM) es la alteración metabólica que más frecuentemente se asocia al embarazo afectando al pronóstico de la madre y al de su futuro hijo. Aproximadamente un 1% de todas las mujeres embarazadas presenta diabetes antes de la gestación (diabetes pregestacional) y constituye un factor de riesgo para el desarrollo de complicaciones en la madre y en la descendencia.
Las posibles complicaciones del embarazo en la mujer con diabetes incluyen un mayor riesgo de malformaciones y/o abortos, de macrosomía (niños de peso mayor de 4 kilos), de muerte fetal, de estados hipertensivos en el embarazo, de parto prematuro y de parto por cesárea y problemas de adaptación postnatal del recién nacido (como la hipoglucemia).
El equipo ha permitido la coordinación de la actividad de diferentes dispositivos asistenciales como la clínica preconcepcional y consulta de diabetes y gestación, consulta de alto riesgo obstétrico, hospital de día de diabetes y área de hospitalización.
La responsable del Servicio de Endocrinología del hospital sevillano, María Asunción Martínez, ha considerado que «el enfoque de la nueva Unidad es muy novedoso, ya que pretende realizar un tratamiento integral que incluya desde la programación de la gestación al control postparto, abarcando una supervisión durante toda la hospitalización, de forma que nos permita un manejo eficaz y seguro de la tecnología aplicada a la diabetes tipo 1, que se está desarrollando en este perfil de pacientes».
La doctora Martínez ha señalado que «la organización de la atención a la mujer gestante con diabetes por equipos multidisciplinares a lo largo de todo el proceso, como es la programación de la gestación, el seguimiento, hospitalización perinatal y control post-parto, se ha demostrado eficaz para mejorar los resultados maternos y fetales».
En la madre también puede favorecer el inicio y/o progresión de determinadas complicaciones de la diabetes como la retinopatía. Además, los hijos de madres con diabetes mal controlada en el embarazo tienen más riesgo de desarrollar en la vida adulta obesidad y alteraciones del metabolismo de la glucosa.
Una adecuada planificación del embarazo en las mujeres con diabetes y un mejor control de los niveles de glucosa en sangre antes y durante la gestación, así como el seguimiento del embarazo coordinado con el Servicio de Obstetricia y Ginecología, pretende reducir las complicaciones y mejorar los resultados en salud para la madre y el recién nacido.
Actualmente, el mayor uso de la tecnología aplicada a la diabetes como las bombas de insulina y sistemas bomba-sensor, estos últimos recientemente financiados por el sistema sanitario público andaluz, permite optimizar el control glucémico de las mujeres con Diabetes tipo 1 y también equipos con mayor especialización y conocimiento en su manejo.
En palabras de María Asunción Martínez, «el objetivo final es mejorar los resultados maternos y neonatales y la calidad de vida de estas mujeres, en una situación clínica tan exigente para pacientes y profesionales como es la diabetes gestacional».
Próximamente, las herramientas destinadas a la mujer gestante con DM tipo 1 que dispone el sistema sanitario público andaluz, se reforzarán con la incorporación del sistema flash, un tipo de sensor de glucosa que permite reducir notablemente la frecuencia de controles de glucemia capilar que se obtienen habitualmente a través de punciones en los dedos, además de facilitar una información completa y dinámica de los niveles estimados de glucosa.