Redacción. El contenido en carotenoides del calostro humano es más bajo en las mujeres que han tenido un parto pretérmino que tras un parto a término. Esta es la conclusión a la que ha llegado la Unidad de Gestión Clínica de Neonatología, en colaboración con el Instituto de la Grasa (CSIC), tras concluir un estudio que ha sido publicado en la revista científica Nutrients.
El objetivo ha sido analizar la presencia de carotenoides en el calostro y la leche madura de las mujeres lactantes cuyo parto fue prematuro o a término, para establecer si existen diferencias significativas, tanto en su inicio como en la etapa de la lactancia en el primer mes de vida. Los carotenoides actúan como protectores naturales de la retina y del sistema nervioso central.
Los profesionales de las unidades de Maternidad y Neonatología del Hospital Virgen del Rocío ofrecieron a las madres la posibilidad de incorporarse al estudio, previo consentimiento informado. Las determinaciones han sido realizadas en el Instituto de la Grasa de Sevilla, entidad dependiente del CSIC.
En el estudio, que ha contado con financiación por proyectos de investigación competitiva Mineco, han participado 144 mujeres sanas que se adhirieron en un período de 12 meses entre 2015 y 2016. Se clasificaron en dos grupos: 72 de ellas dieron a luz a recién nacidos a término (entre las 37 y las 40 semanas de gestación) y otras 72 madres que dieron a luz a neonatos prematuros (entre las semanas 28 y 35).
Los especialistas han demostrado que existe una diferencia cuantitativa en el contenido de carotenoides en el calostro de la leche materna de mujeres cuyos hijos nacen prematuramente, siendo significativamente más bajo que en el calostro de las mujeres cuyos hijos nacen a término. La única excepción ha sido en el contenido de luteína, donde los niveles son similares.
Los resultados demuestran que la condición de nacer prematuramente afecta a la composición cuantitativa de carotenoides del calostro de la mujer lactante, pero no tiene efecto en el contenido de luteína. Este hecho podría estar relacionado con el papel significativo de esta xantofila en el desarrollo de la retina infantil y, posiblemente, con la función cognitiva.
El grupo de investigación apunta a la necesidad de seguir investigando en esta línea de trabajo y determinar la posible presencia de proteínas transportadoras en el epitelio mamario como un tema clave para entender la dinámica existente sobre el contenido de lípidos en la glándula mamaria y la producción de calostro. Los autores del estudio son Ana Xavier, Elena Díaz Salido, Isabel Arenilla Vélez, Josefa Aguayo Maldonado, Juan Garrido Fernández, Javier Fontecha, Alicia Sánchez García y Antonio Pérez Gálvez.