C.P.G. La hermandad más joven de la nómina del día es la que abre la jornada. Desde el Plantinar, llegará un cortejo de apenas 350 nazarenos con una original túnica de cola de ruan verde. A las 12.45 horas se abrirán las puertas de la parroquia de San Diego de Alcalá y comenzará su estación de penitencia la hermandad del Sol, con dos pasos. En el primero, alegórico, se representa a Cristo abrazado en la cruz después de la crucifixión; bajo uno de sus pies, una calavera. En el palio, la sacra conversación con la Virgen del Sol -obra también del Bonilla Cornejo-, María Magdalena y San Juan, siendo el único paso que recoge este pasaje evangélico. El acompañamiento musical corre a cargo de las agrupaciones musicales de la hermandad, ambas con el mismo nombre: la banda de cornetas y tambores y la banda de música Nuestra Señora del Sol. Entre sus estrenos, el bordado de las corbatas del palio de Ana Bonilla. Pedirá a la venia en Campana a las 17.15 horas y su entrada está prevista a las 23 horas. A la ida, discurrirá por Villejas y Marmolejo, San Francisco Javier, Campamento y desde el puente de San Bernardo se adentrará en el centro por la Puerta de la Carne.
La hermandad Servita saldrá desde su pequeña capilla de la calle Siete Dolores de Nuestra Señora, junto a la parroquia de San Marcos, a las 15.30 horas. El Santísimo Cristo de la Providencia aparece en brazos de la Virgen de los Dolores tras ser descendido de la cruz. Va sobre un canasto de madera de caoba oscura iluminado por cuatro faroles de plata, restaurados por Orfebrería Santos. Ambas imágenes son obra de José Montes de Oca (1730) y llevan como acompañamiento musical la banda de Nuestra Señora del Águila de Alcalá de Guadaíra, con un selecto repertorio de marchas fúnebres. Bajo un palio de cajón, la Virgen de la Soledad, tallada por Dubé de Luque (1968), a los sones de la banda municipal de Coria del Río, lleva en su candelería un cirio en recuerdo de los donantes de órganos. Su regreso está fijado a las 22.45 horas.
Tres pasos procesionan desde el santuario de María Auxiliadora de la Trinidad, junto al colegio de los salesianos. De nuevo, un paso alegórico en esta jornada de sábado. Se trata de la Santísima Trinidad. Dios Padre es una talla anónima del s. XVII; Dios Hijo es obra de Emilio Pizarro (1913) y el Espíritu Santo es de Juan de Mayorga. Contemplan la escena una imagen de la Iglesia dormida, de la Fe, un arcángel y un dragón junto a algunos de los padres de la Iglesia, exornado con anthurium blanco. Estrena nuevos bordados para los respiraderos, obra de Marian Martín Santonja. Tras el misterio, la banda de cornetas de Las Cigarreras. En el segundo paso, el Cristo de las Cinco Llagas, de Álvarez Duarte, está siendo descendido por la cruz por los santos varones. La Virgen de la Concepción es de Antonio Bidón, exornado con claveles rojos. Procesiona con los sones de la banda de las Tres Caídas de la Trinidad. Bajo el palio, la Virgen de la Esperanza, que salió de la gubia de Astorga, irá acompañada por la banda de la Oliva de Salteras. A las 15.10 horas pondrá su cruz de guía en la calle, que regresará a su templo a la 1.30 horas de la madrugada.
Sones fúnebres llegarán desde la calle Alfonso XII. Un cortejo de apenas un centenar de nazarenos de túnica, ropón y antifaz negro compuesto por tres pasos. El primero representa la alegoría del triunfo de la cruz sobre la muerte, el conocido como paso de La Canina. La muerte, personificada en un esqueleto provisto de guadaña, aparece sentada y meditabunda sobre la bola del mundo. Tras ella, la cruz con un sudario con la leyenda Mors Mortem Superavit -La Muerte superó a la muerte-. También aparece un dragón con una mazana en la boca, símbolo del pecado. En el segundo paso, el entierro de Cristo: la imagen atribuida al insigne Juan de Mesa, en una urna, con los sones de la banda municipal de Sevilla. En el tercero de los pasos se representa el duelo, con la Virgen de Villaviciosa de Cardoso de Quirós y el acompañamiento de la banda militar. La cruz de guía empezará a recorrer los escasos metros que separan la capilla de San Gregorio de la Campana a las 19 horas y solo cuatro horas después estará de regreso en el templo. El cortejo lo integran numerosas representaciones de las hermandades de Sevilla, con sus respectivas túnicas de nazareno, estandarte y varas, así como representaciones de diversos estamentos sociales, entre ellos, la corporación municipal y varias órdenes.
La Soledad de San Lorenzo fue durante mucho tiempo la hermandad que cerraba la nómina de la Semana Santa. Sale de su parroquia a las 19 horas con un único paso: una Virgen de talla anónima (s. XVI) a los pies de la cruz, acompañada por 1.200 nazarenos de túnica de cola blanca y antifaz y escapulario negro. El paso presenta como curiosidad el hecho de llevar candelería sobre un canasto dorado con candelabros de guardabrisas en las esquinas. En la canastilla y en los respiraderos hay talladas un sinfín de azucenas que afloraron tras la última restauración del paso, exornado, precisamente, con este tipo de flor. La cofradía, que no lleva música, pedirá la venia a las 19. 55 horas y entrará en su templo, entre saetas, poco después de medianoche.
DOMINGO DE RESURRECCIÓN. Unos 600 nazarenos de túnica de capa y antifaz blancos pondrán, el Domingo de Resurrección, el epílogo de la Semana Santa. Será en torno a las 17.15 horas cuando entre el palio de Nuestra Señora de la Aurora a los sones de la marcha Amarguras -que cumple este año el centenario de su creación por parte de los Font de Anta-. El palio de Garduño constituye una de las novedades de esta corporación. La hermandad de la Estrella se lo ha cedido a la corporación de Santa Marina puesto que el que está confeccionando Paleteiro no se había terminado en esta Cuaresma. La agrupación Virgen de los Reyes acompaña al paso de la Resurrección del Señor, obra de Buiza (1973), al igual que el ángel (1975). La banda de música de la Victoria de las Cigarreras, de Dubé de Luque, irá tras el palio. Este es el tercer año que saldrá a las 8.30 horas de la mañana. Concluida la Semana Santa, tras este trienio de prueba, los hermanos decidirán en un cabildo si mantienen este horario o vuelven al anterior, que fijaba su salida a las 5 de la madrugada.