Redacción. Entre el domingo 8 y el lunes 9 regresaron a la Catedral y la Iglesia del Salvador las imágenes que el Cabildo Catedral cedió al Museo de Bellas Artes para que formara parte del discurso expositivo de la gran muestra Montañés. Maestro de Maestros. Las esculturas del Cristo de la Clemencia y La Inmaculada Concepción ya se pueden admirar en sus correspondientes capillas de San Andrés y de la Concepción. Por su parte, el San Cristóbal de la Colegial del Salvador luce ya en su peana habitual.
Estas tres magnas piezas han sido, entre otras 41 del escultor alcalaíno Juan Martínez Montañés (Alcalá la Real, 1568- Sevilla, 1640), protagonistas desde el pasado mes de noviembre de la primera exposición monográfica que se le dedica en Sevilla, al conocido como «dios de la madera» o como «maestro de maestros».
Hasta el 15 de marzo se ha podido descubrir en su conjunto, a través de una selección de 58 obras (la exposición se completa con otras obras de Valera, Pacheco, Gaspar Núñez, Herrera y otros, todos pertenecientes a su contexto artístico), a uno de los grandes maestros de la transición del Renacimiento al Barroco. Un creador único y sublime, que llegó a lo más alto en el arte de su época.
El itinerario, a través de tres secciones, pudo mostrarnos un excepcional repertorio de obras que testimonian la ambición de los grandes encargos que abordó, lo sublime de sus imágenes devocionales y la novedad de sus modelos iconográficos.
En la segunda sección se mostraron destacados ejemplos de su excelente producción imaginera, como San Cristóbal de la Iglesia de El Salvador.
La tercera se centró en sus aportaciones más significativas a la iconografía barroca sevillana, como fue La Inmaculada Concepción (La Cieguecita), o el Cristo de la Clemencia.