Redacción. Este domingo 24 de enero se cumplen 12 años del asesinato de Marta del Castillo, y su familia no puede más. Por ello, José Antonio Casanueva, su abuelo materno, ha pedido hoy que sus asesinos confiesen donde está el cadáver «de cualquier forma».
Es un llamamiento que hace a la desesperada un hombre que cumplirá 85 años el próximo mes de septiembre y que teme, claramente, irse sin enterrar a su nieta.
Por eso, ha pedido «que haya un anónimo o lo que sea, para poder descansar nosotros». Ha recordado, además, que «mi señora se fue sin saber dónde estaba su nieta, y yo creo que me voy a ir y tampoco voy a saberlo».
Jardines de Marta
Así lo ha explicado en los jardines de la barriada Tartessos de Sevilla donde vive toda la familia. Unos metros por detrás vivía un hermano de Miguel Carcaño, el único acusado oficialmente por el crimen. Una pancarta pide justicia para la joven y la repetición del juicio, con un ramo de flores que han colocado algunos vecinos para conmemorar la fecha en concreto.
La familia ha pedido en reiteradas ocasiones que las personas que saben dónde está el cadáver lo digan, con el fin de que sea enterrado y terminar con la situación que viven desde entonces. Nunca lo han confesado.
Enero de 2009
El caso despertó el interés de la sociedad y medios de comunicación de España. Hasta en cuatro ocasiones los acusados afirmaron sucesivamente que el cuerpo se encontraba en distintas zonas. Fue buscado en el río Guadalquivir, un vertedero o la localidad de Camas, siempre sin resultado.
Actualmente, el cuerpo de la joven sigue en paradero desconocido, y el principal acusado, Miguel Carcaño en cuya chaqueta se encontró sangre de Marta del Castillo, ha dado hasta nueve versiones distintas de los hechos.