Redacción. La Diputación de Caridad de la Hermandad de la Soledad de Alcalá del Río ha cerrado la pasada Navidad con un balance de una tonelada de alimentos entregada a Cáritas Parroquial de la localidad, así como un lote de juguetes para 150 niños y niñas de familias con dificultades económicas repartidos a través de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. Una importante labor asistencial con la que la corporación inicia el año del XXV Aniversario de la Coronación Canónica de Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad, una efeméride que estará marcada por el culto, la formación y la caridad.
Mediante la campaña ‘Donantes de Ilusión’, la Diputación de Caridad ha adquirido juguetes para 150 niños y niñas sevillanos, de un total de 92 familias, repartidos por las Hijas de la Caridad. De forma voluntaria y anónima, y en nombre de la Hermandad, 100 soleanos han realizado aportaciones económicas para la adquisición de los juguetes.
En esta cuarta edición consecutiva de la campaña, y dadas las circunstancias sanitarias, la dinámica ha sido distinta. Si bien en las tres ediciones anteriores cada Donante de Ilusión apadrinaba a una familia y entregaba juguetes atendiendo a las edades de los menores, en esta ocasión se ha decidido que las aportaciones fueran económicas, de modo que la Diputación de Caridad se haría cargo de la compra y se reduciría la manipulación de los presentes, evitándose así una posible vía de propagación del coronavirus.
1.007 kilos de alimentos no perecederos y productos de primera necesidad
No ha sido esta la única iniciativa que ha llevado a cabo la Diputación de Caridad en esta pasada Navidad. Al inicio de estas fiestas, la Hermandad hizo entrega a Cáritas Parroquial de Alcalá del Río de 1.007 kilos de alimentos no perecederos y productos de primera necesidad, recaudados gracias a las generosas donaciones de los Donantes de Alimentos.
El proyecto, iniciado por la Juventud Cofrade en colaboración con la Diputación de Caridad en septiembre de 2013, funciona mediante una red de donantes de alimentos, a los que un grupo de voluntarios recoge mes a mes su aportación en sus domicilios. Las cantidades recaudadas – en torno a los 500 kilos mensuales – se entregan principalmente en Cáritas Parroquial de Alcalá del Río y como ayudas de emergencia directas por parte de la corporación del Viernes Santo, además de destinarse a las Hijas de la Caridad y a comedores sociales en ocasiones concretas.
En el año 2020, los Donantes de Alimentos han aportado 5.971,985 kilos. De estas casi 6 toneladas, 4.397,77 kilos han sido entregados a Cáritas Parroquial, destinándose 1.154,065 kilos a ayudas de emergencia directas, y 420,15 kilos a los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alcalá del Río al inicio de la pandemia.
Un inicio extraordinario para el año del XXV Aniversario de la Coronación
Estas dos importantes donaciones han supuesto un inicio extraordinario para el año del XXV Aniversario de la Coronación Canónica de Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad. Una efeméride que se cumplirá el próximo 15 de junio y para el que la Hermandad ya viene desarrollando un intenso programa de actos y conmemoraciones. En lo que respecta a la labor asistencial, la Hermandad llevará a cabo una obra social que comprende dos proyectos.
De una parte, sufragará el mobiliario y el equipamiento de las salas de fisioterapia, logopedia y apoyo pedagógico del Centro Tas de Alcalá del Río. Como segundo proyecto, la Hermandad sufragará el pago del profesorado del Centro educativo Santo Hermano Pedro, regentado por las Hermanas Bethlemitas en Santa Cruz del Quiché (Guatemala), misión con la que se colabora desde el año 2005 y donde se ha sufragado la construcción de una escuela, un dispensario médico y un oratorio que presiden los titulares de la corporación soleana.
La Hermandad de la Soledad mantiene una intensa labor asistencial a través de su Diputación de Caridad, intensificada en la pandemia con la confección de más de 50.000 mascarillas para repartir a toda la población de Alcalá del Río, así como a centros sanitarios y distintas empresas y entidades, y la formación de un voluntariado asistencial para ayudar a las personas mayores e impedidas con las compras durante el confinamiento.